Canción del año. Por razones difíciles de escrutar, y que solo empiezan a descubrirse hacia la vigésima escucha. La dulce venganza de uno de los géneros más odiados, particularmente desde el mundillo indie: el AOR (Adult Oriented Rock), o Soft Rock o, en su acepción moderna y mucho más acertada, el Yacht Rock, cuya única característica en teoría defendible es la excelente producción. Fleetwood Mac, para que se entienda. Gracias Daft Punk.
Género que, ojo, ha vuelto (no se pierdan este enlace), y en formato mejorado.
Actualización: al medio musical más influyente del Universo le parece que el video de Canada para Rosalía es el mejor del año en todo el mundo y el disco acaba en el top 6 en lo que imagino que es el mejor resultado nunca obtenido por un disco español. Ojo a la burbuja barcelonesa.